Israel ataca sitios sirios y se prepara para más disturbios y protestas
04/10/2023
La respuesta del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a los ataques transfronterizos de la semana pasada y a los ataques gemelos contra civiles generó críticas de funcionarios de extrema derecha. Mientras tanto, las manifestaciones antigubernamentales han estado denunciando la agenda política del gobierno por decimocuarta semana consecutiva. Las redadas de la policía israelí en uno de los lugares más sagrados del Islam la semana pasada provocaron un espasmo de violencia de varios días que, durante 12 horas el jueves, amenazó con extenderse por toda la región. El ejército lanzó ataques aéreos contra lo que dijo que eran objetivos afiliados a Hamas en Gaza y el sur del Líbano después de que se dispararan cohetes contra el espacio aéreo israelí desde ambas áreas, hiriendo a un civil y dañando edificios. El sábado, el secretario de Defensa, Lloyd Austin, habló con su homólogo israelí, Yoav Gallant, según una lectura del Pentágono de la llamada, y “subrayó su apoyo a la seguridad de Israel contra todas las amenazas”.
Desde la noche del sábado hasta la madrugada del domingo, las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron que se dispararon seis cohetes desde Siria hacia Israel, tres de los cuales habían cruzado al territorio israelí. Las FDI tomaron represalias con ataques de drones y artillería, incluso en lo que dijo que eran los lanzadores que habían disparado las municiones. Poco después, los medios estatales sirios informaron que se escucharon explosiones en Damasco, la capital. El lanzamiento de cohetes del fin de semana se produjo después de que el gabinete de Netanyahu votara unánimemente el viernes a favor de ataques limitados en territorio libanés.
Netanyahu regresó al cargo a fines del año pasado como parte de una nueva coalición de gobierno, la más derechista y religiosamente conservadora en la historia de Israel. La respuesta de los principales actores de la coalición la semana pasada subrayó cuán delicada se ha vuelto su posición, ya que las figuras más extremas de las que depende para gobernar exigen una acción más dura. El gobierno ya ha acelerado un programa de demolición dirigido a las casas de los sospechosos de terrorismo, una medida que los grupos de derechos políticos han descrito como un castigo colectivo. Bezalel Smotrich, líder de los colonos y miembro de alto rango del gabinete de Netanyahu, dijo el viernes que su voluntad de tolerar acciones que no incluyan medidas más extremas en los territorios estaba disminuyendo.
