
El humo de los incendios forestales canadienses envuelve la costa este, alterando la vida diaria
06/08/2023El humo de los incendios forestales generalizados en Canadá ha llegado al este de los Estados Unidos, causando interrupciones significativas y problemas de salud. El humo ha provocado alertas de calidad del aire de «Código rojo» en toda la región, incluida la ciudad de Nueva York, donde la neblina cubrió puntos de referencia icónicos y provocó el retraso de un juego de béisbol y cancelaciones de vuelos. La mala calidad del aire ha llevado a los funcionarios a recomendar el uso de máscaras al aire libre y cancelar los eventos al aire libre. Los incendios forestales en Canadá, alimentados por condiciones cálidas y secas exacerbadas por el cambio climático, han dado lugar a una temporada de incendios forestales sin precedentes, con más de 400 incendios activos y millones de acres quemados.
El humo de los incendios forestales ha afectado la vida cotidiana en varias ciudades a lo largo de la costa este. Las escuelas cancelaron las actividades al aire libre y trasladaron el recreo al interior, mientras que se recomienda a los residentes que tomen precauciones debido a los efectos nocivos del humo. La calidad del aire en algunas áreas ha alcanzado niveles peligrosos y la exposición al humo puede causar problemas respiratorios y exacerbar las condiciones de salud existentes. La situación destaca los impactos de gran alcance de los incendios forestales, que ya no se limitan al oeste de los Estados Unidos, y subraya la conexión entre el cambio climático y el aumento de la frecuencia e intensidad de los incendios.
Los funcionarios instan a las personas a estar preparadas para incendios forestales más frecuentes y severos a medida que el clima continúa calentándose. La administración Biden está monitoreando de cerca la situación y ha brindado asistencia a Canadá para combatir los incendios forestales. El humo generalizado y sus consecuencias sirven como un recordatorio de la urgencia de abordar el cambio climático y sus efectos destructivos, con temperaturas más cálidas y sequías severas que contribuyen a incendios más grandes e intensos.